Translate

jueves, 31 de julio de 2014

Koinonia en La Porciúncula

Koinonía es la transliteración de la palabra griega κοινωνία, que significa comunión; como concepto teológico alude a la comunión eclesial y a los vínculos que ésta misma genera entre los miembros de la Iglesia y Dios, revelado en Jesucristo y actuante en la historia por medio del Espíritu Santo.[1]
La Porciúncula (en latínPortiuncula; en italianoPorziuncola), es una pequeña iglesia incluida dentro de la Basílica de Santa María de los Ángeles, ubicada aproximadamente a 4 km de la capital municipal, en Umbría (Italia). Es el lugar donde comenzó el movimiento franciscano.
El nombre Porciúncula significa «pequeña porción de tierra» y fue mencionado por vez primera en un documento que data de1045, actualmente en los archivos de la Catedral de San Rufino, en Asís.
Con este nombre también se denomina a la indulgencia plenaria que pueden ganar los fieles católicos el 2 de agosto (u otro día que designe el ordinario local para aprovechamiento de los fieles).[2] En el 1216, en una visión, Francisco obtuvo del mismo Jesús la indulgencia conocida como "la indulgencia de al Porciúncula" o "el Perdón de Asís", la cual fue aprobada por el papa Honorio III.
Aquí vivió San Francisco con sus primeros hermanos, que se unieron a él, en la vida nueva de santa pobreza, trabajo manual, cuidando a los leprosos, mendigando y predicando el amor de Cristo. Siendo los benedictinos propietarios de aquel lugar, Francisco pagaba como renta anual una canasta de pescado.
El 28 de marzo de 1211,  Clara de Favarone de Offreduccio, recibió aquí el hábito religioso de manos de San Francisco, dando inicio a la Orden de las Damas Pobres (Clarisas).
Aquí san Francisco reunía cada año a sus frailes en los capítulos (reuniones generales).
En una noche de Julio del año 1216, Francisco, sintió un impulso irresistible de ir a la pequeña Iglesia, la Porciúncula. En cuanto entró, como siempre, se arrodillo, inclinó su cabeza y dijo esta oración: "Te alabamos, Señor Jesucristo, en todas las iglesias del mundo entero. Y te bendecimos porque por tu santa cruz redimiste al mundo." Luego al alzar su mirada, en su asombro Francisco vio una luz brillante arriba del pequeño altar y en unos rayos misteriosos el vio al Señor con su Santísima Madre con muchos ángeles.
Con pleno gozo y profunda reverencia, Francisco se postró en el piso ante esta gloriosa visión y Jesús le dijo: "Francisco pide lo que quieras para la salvación de los hombres". Sobrecogido al escuchar estas palabras inesperadas y consumido por un amor angelical por su misericordioso Salvador y por su Santísima Madre, Francisco exclamo: "Aunque yo soy un miserable pecador, yo te ruego querido Jesús, que le des esta gracia a la humanidad: dale a cada uno de los que vengan a esta Iglesia con verdadera contricción y confiesen sus pecados, el perdón completo e indulgencias de todos sus pecados".
Viendo que el Señor se mantenía en silencio, Francisco se dirigio con un confiado amor a Maria, refugio de los pecadores, y le suplicó: "Te ruego, a Ti, Santísima Madre, la abogada de la raza humana, que intercedas conmigo, por esta petición". Entoces Jesús miro a Maria, y Francisco se alegró al ver a Ella sonreir a su Divino Hijo, como que si dijera: "por favor, concédele a Francisco lo que te pide, ya que esa petición me hace feliz a mi".
Inmediatamente Nuestro Señor le dijo a Francisco: "Te concedo lo que pides, pero debes de ir a mi Vicario, el Papa, y pídele que apruebe esta indulgencia". La visión, entonces, se desvaneció dejando a Francisco en el piso de la capilla, llorando de alegría, con profundo amor y agradecimiento.
También en este Sagrado Lugar,  murió san Francisco. [1]

martes, 29 de julio de 2014

Experiencia espiritual y mirada contemplativa franciscana.

Camino al 35°Aniversario de la Proclamación de San Francisco de Asís, Patrono de la Ecología (1979-2014)
VOCACION HUMANA A SER CUSTODIOS
(Tercera entrega)
Lic. Fray Luis Antonio Scozzina ofm
Director del CEFEDER
UCA ROSARIO
 
  III. Experiencia espiritual y mirada contemplativa franciscana.
La originalidad de la vida y la experiencia de Dios de San Francisco ofrece a la espiritualidad cristiana actual y la teología de la creación recuperar una dimensión integral de la antropología cristiana reproponiendo una nueva clave ética y existencial, así lo formula J. A. Merino[16], en  su libro sobre ecología en clave franciscana: “El convencimiento sentido y vivido en la espiritualidad franciscana es el reconocimiento y la celebración de la gratuidad de la vida y del mundo como don. Desde ese reconocimiento de la gratuidad de la existencia, la vida se transforma en celebración, fraternidad y gratuidad. Quien logra descubrir el mundo y todo lo que hay en él como gracia y gratuidad, no puede ser un agente destructor, depredador ni corruptor del mundo natural. Es verdad que la ecología es cuestión de ciencias interdisciplinares, de técnicas sanas y de políticas protectoras. Pero también es verdad que la ecología necesita de una nueva mentalidad en todos los habitantes de este universo, que se debe traducir en respeto, salvaguarda y protección… …El franciscanismo puede ser el fermento de una revolución pacífica de las conciencias y de los comportamientos para sanear el medio ambiente y poder llegar a la gran fraternidad cósmica, que es el símbolo de lo que nos falta”

 La experiencia espiritual de San Francisco, su modo existencial de relacionarse con Dios y con la creación desde la “lógica del don” le permitirá tanto a la espiritualidad como al pensamiento filosófico-teológico franciscano; proponer “presupuestos válidos para una antropología relacional y una ética de sencillez, de la moderación y de la frugalidad como respuesta a la explotación y dilapidación del medio ambiente. Para la sensibilidad franciscana no se trata de conocer y de  interpretar la realidad, sino también de actuar. Además, la vida es un sacramento y todo lo que existe es un regalo. Esto postula el respeto de los recursos naturales, su uso moderado y sobrio, gozar también de las pequeñas cosas de cada día,  evitando lo superfluo y el derroche como signos de incultura… …. Desprendimiento voluntario de cosas, sencillez de vida y alegría por el don de la existencia son actitudes de reverencia por la creación y modelo de convivencia. El ascetismo franciscano es la consecuencia de la perfecta alegría. Quién está alegre, celebra. Quien celebra, comparte. Quien comparte, hace justicia al Creador y es cortés con toda la creación.”[17]
         La valoración de la singularidad y de la diversidad de la naturaleza permite una mirada no sólo ética sino también contemplativa de la creación. El Cántico de las Criaturas de Francisco es también un concierto de alabanza y acción de gracias del universo entero por la llamada a la existencia: “Loado seas, mi Señor, con todas tus criaturas”.  Esta tradición espiritual está recuperada en el Documento de Aparecida (DA 125) y es asumida explícitamente en el ministerio apostólico del Papa Francisco, cuando une cuidado de la tierra y cuidado del hombre y del más vulnerable desde la experiencia de amor al Cristo sufriente y resucitado.
Editado por: Marina Fiorino Sierra
____________________________________________________
16 Merino, J.A., Francisco de Asís y la ecología. Madrid 2008
17  Tomado del subsidio para la formación permanente sobre el Cap. IV de las CC.GG.OFM, “Peregrinos y extranjeros en este mundo”, p.63-4 Roma 2008

miércoles, 23 de julio de 2014

Corona franciscana


La corona franciscana es sinónimo del Rosario de las Siete Gozos de la Virgen María
Entre los Frailes Menores la promoción de la devoción está atribuida a San BuenaventuraBeato Cherubin de SpoletoSan Juan de CapistranoPelbart de Temesvár, y San Bernardino de Siena por nombrar algunos. San Bernadino también tuvo una aparición de la Virgen cuando estaba meditando sobre los siete gozos de María. Esta devoción está favorecida con muchas indulgencias concedidas por los Papas.
En reflexionar sobre la virtud de gozo en la vida de la Virgen María recordamos la salutación de san Francisco a ella: Salve! Señora, Reina santa, Madre santa de Dios, María! Eres Virgen hecha iglesia …
Cómo rezarlo

  • {A}. Signo de la Cruz Líder: + En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo Todos: Amén!
  • {B}.Misterios de Las Siete Alegrías de la Virgen María: {Después de cada Misterio se reza 1: Padre Nuestro y 10 Ave Marías.}
    1. La Anunciación a la Santísima Virgen {Lucas 1:26-33; 38}
    2. La Visitación de María a su prima Isabel. {Lucas 1:39-45}
    3. El Nacimiento de Nuestro Señor Jesús. {Lucas 2:1-7, u 2:6-12}
    4. La Adoración de los Reyes Magos/Epifanía. {Mateo 2:1-2, y 9 -11}
    5. La Presentación de Jesús en el Templo. {Lucas 2:22-2325-32}
    6. La Resurrección de Nuestro Señor Jesús. {Marcos 16:1-7Lucas 24:36-41Juan 20:19-22}
    7. La Asunción y Coronación de la Virgen Santísima. {Lucas 1:46-55Salmo 45(44):11-14Apoc.12:1;5-6}
    • Oraciones
      • Padre Nuestro {1x}: Padre Nuestro, que estás en el cielo, santifícado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. - Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos de todo mal. Amén.
      • Ave María: {10x}: Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo; bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es fruto de tu vientre, Jesús. - Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros los pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

  • {C}. Como costumbre después del Septimo Misterio se rezan 2: Aves para completar 72 Aves en honor de los años que, según la tradición, la Virgen vivió.
  • {D}. Oración para el Papa: Como costumbre, terminando se reza 1: Padre Nuestro y 1: Ave María por las intenciones del Santo Padre el Papa.
  • {E}. Signo de la Cruz: + En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Todos: Amén.